El Calibre 321 fue el primer movimiento que se utilizó en el Omega Speedmaster, destacándose por utilizar una rueda de pilares mono bloque, es decir, fabricada en una sola pieza, lo que añade valor técnico ya que los movimientos de rueda de pilares requieren una precisión extrema en su diseño y realización, además su robusto y elegante movimiento lo hace muy apreciado por los coleccionistas de relojes.
Hoy tras 50 años desde el ultimo Calibre 321, Omega recupera el icónico movimiento, que debe hacerse con la máxima precisión por lo que la firma recurrió a un equipo de expertos compuesto por investigadores, programadores, historiadores así como los mejores artesanos y maestros relojeros que trabajaron más de dos años y en total secreto, para reconstruir el movimiento y proteger los detalles exclusivos del proyecto.
Todo esto dando como resultado piezas más exclusivas e icónicas del Calibre 321 reelaboradas según las especificaciones originales, además de que el movimiento se ajusta a la perfección al “período lunar” de la historia de Omega.
“Es fantástico que tanta gente sienta pasión por el Calibre 321. Produjimos el último en 1968 y los fans nunca han dejado de hablar de él. Eso demuestra lo especial que es. Estamos muy emocionados por cumplir finalmente los deseos de estos aficionados y hemos hecho un gran esfuerzo para que el movimiento vuelva”. Comenta Raynald Aeschilmann, presidente y CEO de Omega
Los nuevos movimientos entrarán ahora en producción en la sede de Omega en Bienne, donde el montaje de cada movimiento, su incorporación a la caja y el montaje de la pulsera serán realizados por el mismo relojero. Además todos los aspectos de la creación se llevarán a cabo en un taller dedicado exclusivamente al Calibre 321.
