El reloj oficial presentado para esta ocasión especial fue el Longines Conquest Chronograph con nuevos modelos que combinan la elegancia deportiva con la robustez para el uso diario. Conquest, 70 años de innovación y elegancia desde 1832.
FEI Jumping World Cup™ es el escenario perfecto para el Conquest Chronograph, Longines como socio principal y cronómetro oficial. Maria Gabriela Brugal, en su segunda participación en esta serie, aseguró su primera victoria montando a J’adore Flamenco, un caballo Anglo-Árabe de 13 años, al conseguir el único recorrido sin faltas de la competencia.
El evento, que reunió a un total de 22 jinetes, fue testigo de una clasificatoria poco común, en la que no hubo desempate. Alejandro Mills, de México, se llevó el segundo puesto con Bretzel du Marais, al terminar su pista sin derribos pero con dos penalizaciones por tiempo, mientras que el también mexicano Miguel Maron Kahwagi subió al podio en tercer lugar con Cayene de Boisquillon, al ser el más rápido entre los jinetes con cuatro faltas.
En esta ocasión, Longines presenta el reloj oficial del evento, Conquest Chronograph, la primera colección de Longines cuyo nombre fue protegido por la Oficina Federal de la Propiedad Intelectual de Suiza en 1954. Desde entonces la colección ha evolucionado a través del diseño y tecnología, pero se ha mantenido fiel a su identidad original, creando una armoniosa fusión de audacia, diseño contemporáneo y elegancia deportiva. Cada reloj Conquest Chronograph es una muestra del firme compromiso de Longines con el rendimiento y la excelencia relojera. Estos cronógrafos están impulsados por un exclusive calibre Longines equipado con espiral de silencio.
Con movimiento mecánico automático, 28.000 alternancias por hora y 59 horas de reserva de marcha aproximadamente y un mecanismo cronógrafo: segundero central de cronógrafo, contador de 12 horas a las 6 y contador de 30 minutos a las 9. Este material no solo es ligero y resistente a la corrosión, sino que además no se ve afectado por las variaciones normales de temperatura ni por los campos magnéticos. Sus propiedades únicas mejoran la precisión y longevidad del reloj y permiten a Longines garantizar estos modelos durante 5 años.
