Sumergirse en el pasado de Bulova, no sólo es un ejercicio de historia relojera, también es atestiguar algunos de los eventos más destacados de la cultura americana. La historia de Bulova es, en muchos sentidos, la historia moderna de Estados Unidos: ambición, ingenio, cultura pop y un compromiso férreo con la innovación.
Todo comenzó en 1875, cuando un joven de 19 años llamado Joseph Bulova cruzó el Atlántico desde lo que hoy es la República Checa, decidido a construir algo grande. Lo logró. Su pequeña tienda en Manhattan se convirtió en la cuna de una revolución relojera. Mientras otros seguían métodos tradicionales, Joseph adoptó el “Sistema Americano de Relojería”, un enfoque industrial que le valió el sobrenombre de “el Henry Ford de la relojería”. Precisión, producción estandarizada y precios accesibles: la democratización del lujo había comenzado.
Pero Bulova no se conformó con dominar la técnica. Su verdadero impacto se dio cuando decidió integrarse a la cultura estadunidense. En 1926 lanzó el primer anuncio de radio de la historia, y en 1941, durante un partido de béisbol, emitió el primer anuncio de televisión jamás transmitido. El mensaje era claro: Bulova no solo hacía relojes, hacía historia.
Años después, nombres como Frank Sinatra, Muhammad Ali y Johnny Cash prestaron su rostro —y su voz— a la firma, sellando su lugar como emblema del estilo, no solo del masculino, sino también del femenino, ya que en 1917 creó la primera colección de relojes de pulsera para mujer.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Bulova puso su ingeniería al servicio de la nación, creando instrumentos de navegación y el famoso reloj de piloto A-11, conocido como “el reloj que ganó la guerra”. Más allá del campo de batalla, su compromiso con los veteranos se materializó con la fundación de la Escuela de Relojería Joseph Bulova, dedicada a rehabilitar a soldados con discapacidades físicas. Sin duda, un acto de responsabilidad social mucho antes de que eso fuera tendencia.
Y luego vino el espacio. La NASA confió en Bulova para 46 misiones espaciales entre los años 50 y 70, incluyendo el programa Apolo. La tecnología Accutron —basada en un diapasón en lugar del tradicional volante— se convirtió en sinónimo de precisión en condiciones extremas. No se trataba solo de cronometraje: se trataba de ayudar a conquistar la última frontera.
Más recientemente en 2010, Bulova volvió a romper moldes con el movimiento Precisionist, una máquina capaz de medir hasta milésimas de segundo con un segundero de movimiento continuo. Y luego vino CURV, el primer cronógrafo curvo del mundo, una declaración de que el diseño y la tecnología pueden —y deben— caminar juntos.
Hoy, tras 150 años de historia, Bulova sigue siendo fiel a sus raíces: desafiar lo establecido, abrazar el cambio y diseñar relojes que no solo son un accesorio más, sino que tienen un profundo significado. Hay relojes que simplemente dan la hora, y hay otros que marcan una época. Siempre creados bajo el espíritu indomable de América.
CELEBRACIÓN EN CDMX
“Hoy nos reunimos para conmemorar la rica historia y el legado de está icónica y querida marca de relojes. A lo largo de siglo y medio sinónimo de precisión, innovación y estilo. Desde su fundación en 1875 hemos estado comprometidos con la excelencia y pasión por la relojería. En este evento queremos compartir con ustedes la historia y patrimonio de Bulova y mostrarles algunas de nuestras últimas creaciones e innovaciones conmemorativas”, comentó Jorge Acevedo, director general de Citizen Watch Group México quien dio la bienvenida a los asistentes para celebrar los 150 años de Bulova, que comenzó con la proyección de América Telling Time: 150 Years of Bulova, un documental de 60 minutos donde se hace un recorrido minucioso por la historia de la firma americana que creó el Accutron y Precisionist, dos iconos de la relojería contemporánea. Para continuar con la celebración, los invitados fueron testigos de un show de drones que iluminaron los cielos de la Ciudad de México con coloridas imágenes de los relojes de Bulova, finalmente y para completar la noche se disfrutó de un coctel donde se pudo convivir con algunos embajadores de la firma como Daniel Gutiérrez, guitarrista del grupo La Gusana Ciega y la cantante Paty Cantú.
Colección Bulova 150 aniversario
Reloj de bolsillo
Inspirado en un diseño original de los años 20 con carátula en plata esterlina y manecillas en azul. Cuerda automática con reserva de marcha de 60 horas. 350 piezas. 10 disponibles en México.
Miss America
Basado en la pieza de 1930. Destaca su carátula de estilo vintage y brazalete de filigrana tipo Art Deco. Edición limitada de 600 piezas. 3 disponibles en México.
Mil-Ships
Dos versiones en caja de bronce inspiradas en un reloj prototipo creado para la Marina de los Estados Unidos en 1957.
Rubaiyat Four Seaons
Esta serie de relojes se inspira en las estaciones del año. Este modelo llamado Winter posee una caja de 30 mm y carátula en madre perla.
Series X Marc Anthony
Inspirados en el espíritu creativo de Marc Anthony, destacan por su caja cuadrada de cristal zafiro, movimiento mecánico de carga automática.
