FOTOGRAFÍA: CORTESÍA DE LA MARCA
Con gran expectación, Alejandro Speitzer desfiló recientemente en los shows de moda masculina de Milán para Dolce & Gabbana. La firma lo eligió para representar una imagen elegante y veraniega, con ese porte mediterráneo que define la estética italiana: relajada, sensual, sofisticada. La colección primavera-verano 2026 se inspira en la comodidad personal, con el pijama como pieza estelar. Domina el estilo desenvuelto, con sacos livianos, cardigans suaves y tejidos ligeros. El actor brilló en la pasarela, dejando claro su dominio del estilo.

Speitzer compartió reflectores con figuras como Theo James, Jung Hae-in, Lucien Laviscount, Michele Morrone, João Guilherme y Jaren Jackson. Mientras la moda miraba hacia los años 80, el cine lo lleva a los 70 con su nueva película: Autos, moda y rocanrol, dirigida por José Manuel Cravioto. El filme revive el “Festival Rock y Ruedas” de Avándaro, celebrado el 11 de septiembre de 1971. Originalmente concebido como un evento automovilístico con música, terminó por convertirse en un fenómeno masivo e inesperado. Fue el “Woodstock mexicano”. Cravioto recrea el suceso casi como un documental, explorando su impacto cultural. Speitzer interpreta a Eduardo “El Negro” López Negrete, uno de los principales organizadores del festival. Lo que comenzó como una propuesta deportiva, tuvo en el concierto su clímax y también su desborde.
En pantalla, Alejandro encarna con naturalidad la vibra de aquellos años. Comparte el protagonismo con Emiliano Zurita, y ambos sostienen gran parte del peso dramático de la historia. La película, además, ofrece un vestuario setentero tan bien logrado que merece exhibirse en un museo de moda. Speitzer lleva más de dos décadas frente a las cámaras. Debutó a los cinco años, y desde entonces ha aparecido en títulos como Atrévete a soñar , La Rosa de Guadalupe y Misión SOS. Su carrera creció con personajes más complejos, como en La Reina del Sur , o en las series Oscuro deseo y Alguien tiene que morir.

En cine, ha participado en producciones como Disco, Ibiza y Locomia, Pimpinero, Sangre y gasolina, consolidando su presencia en la gran pantalla. Actor disciplinado y meticuloso, Speitzer se entregó por completo a su papel de psicópata en Oscuro deseo, y llegó a perder hasta diez kilos para su rol en Alguien tiene que morir. Más recientemente, se convirtió en superhéroe en Coyotl: Héroe y Bestia, un personaje que exigió largas sesiones de maquillaje diario. Aun así, reconoce que el esfuerzo valió la pena. “Ha sido muy lindo leer el recibimiento que ha tenido la serie”, escribió en sus redes. “Risas a montones con nuevos y talentosos amigos y la satisfacción de haber llevado ese poderoso mensaje desde la ficción: que somos más los buenos”.
Alejandro confiesa que suele poner algo de su vida en cada personaje, y que su activismo contra la injusticia alimenta su manera de interpretar. Construye héroes desde la autenticidad, sin seguir moldes. Así ocurrió también con Autos, mota y rocanrol. “Hablando de esa época, había una forma muy particular en la que los jóvenes se expresaban, y pudimos profundizar en eso. Cravioto nos dio las herramientas necesarias para desarrollar a nuestros personajes. En mi caso, “El Negro” ya había fallecido, pero, curiosamente, la hija de un amigo mío fue amiga suya. Esas casualidades mágicas que tiene esta profesión”, contó el actor. “Pude platicar con ella y nos identificamos. Me fui encontrando con más coincidencias y me metí en su vida lo más que pude, aunque no tuve oportunidad de conocerlo. En esos años, México era distinto. Representar a una generación que puso sobre la mesa tantos cuestionamientos fue muy significativo”, agregó.
La película cuenta con un sólido elenco: Ianis Guerrero, Ruy Senderos, Juan Pablo de Santiago, Luis Curiel, Enrique Arrizon y el comediante Alex. El filme se estrenará el 11 de septiembre, en el aniversario del concierto original. “Qué placer más grande mostrar el trabajo que hicimos de la mano de nuestro director, José Manuel Cravioto”, concluye Speitzer.