La cita donde se rinde majestuoso tributo a la belleza, estética y precisión en los autos más admirados del mundo lleva por nombre Concorso d’Eleganza Villa d’Este y se logra con el patrocinio y el respaldo de la alta relojería de A. Lange & Söhne. El encuentro ya es un clásico en las agendas de los coleccionistas. Ocho años lleva la firma relojera apoyando este evento donde el diseño debe ser también eficaz. Como señala el CEO de Lange, Wilhem Schmid: “Es la búsqueda de la última precisión y la estética, seguido de las proporciones del arte. Este evento refleja nuestra pasión por la mecánica sofisticada y el diseño que emociona”.
Entre los vehículos galardonados están un Alfa Romeo 8C 2900B de 1937 y otro Alfa Romeo 8C 2900 Zagato. El ganador recibe una pieza de la edición Como, de A. Lange & Söhne Time Zone, grabado con la conmemoración del encuentro en Villa d’Este y el escudo de armas del concurso. Lange nos convoca a otros eventos con la belleza y la elegancia como protagonistas; en agosto el Classic Day Dyck en Alemania y en Hampton Court Palace durante septiembre. Un escenario de lujo londinense al más alto nivel.
La sinfonía de la máquina es el lema del 90 aniversario de este concurso reservado a los autos más exclusivos. Ingeniería, artesanía y diseño son valores paralelos entre autos y relojería. Es todo un mundo el de quienes sienten admiración por el pasado, los amantes de las piezas vintage capaces de conservar tesoros y atender a los detalles. El pasado mayo, el Grand Hotel Villa d’Este acogió la 90 edición de este encuentro de coleccionistas.
A este concurso de elegancia que patrocina A. Lange & Söhne se dan cita carismáticos personajes que comparten su pasión entre relojes mecánicos y autos clásicos. Como Duccio Lopresto, que ganó con su Alfa Romeo Giulietta el premio Best Show del concurso de elegancia hace dos años. Ama los coches desde su infancia. Su padre, un arquitecto milanés y coleccionista, lo traía a los concursos de elegancia con apenas catorce años. Hoy es uno más de los que pasea sus fabulosos carros, que sin duda son fruto de un trabajo de coleccionismo, búsqueda, y pasión.

Los más jóvenes empiezan a ver en estas piezas, casi mitológicas, valores de diseño, calidad y atención al mirar el coleccionismo de coches clásicos, el amor por la alta y precisa relojería, como un arma cargada de futuro. El poderoso rugido de seis, ocho y doce cilindros se convierte en una sinfonía de motores en Villa d’Este, la ciudad en el Lago de Como.

Y para darle ritmo, mecánica, precisión y sonería a esta armonía mecánica, sólo pudo ser con el tictac ligero de creación horaria de Lange 1 Como Edition, el exclusivo reloj A. Lange & Söhne con caja de oro blanco, personalizado para la ocasión con el emblema del distinguido concurso grabado a mano en la parte posterior. El ganador fue el estadunidense David Sydorick pilotando una joya que brilla hasta con el motor apagado, su Alfa Romeo 8C 2900B, una berlinetta con motor de 8 cilindros de la línea 1937.
El dos veces ganador del Best of Show, Sydorick, ya había triunfado en 2015 con un Alfa Romeo 8C 2300 Spider Zagato. Recibió el premio de manos del CEO de A. Lange & Söhne, Wihelm Schmid, quien subrayó: “El Concorso d’Eleganza se centra en la idea de recopilar, preservar y garantizar que estas obras maestras de cuatro ruedas superen el desafío del tiempo. “Por eso estamos tan conectados con el mundo de los coches clásicos. Reflejan nuestra pasión por la mecánica sofisticada y el diseño electrizante, que está profundamente arraigado en la cultura corporativa de A. Lange & Söhne”. Un homenaje a la belleza precisa.