TEXTO: MARÍA ROSA
“Tengo una pasión un tanto vergonzosa por las sillas. Creo que es porque es lo más difícil, no perdona nada. Es difícil estar contento con una silla”.

La frase pertenece al italiano Vico Magistretti (1920-2006), arquitecto especializado en diseño de producto que trabajó toda su carrera en el estudio situado en las esquinas de las calles Conservatorio y Vincenzo Bellini, de Milán, en un edificio diseñado por su padre, Pier Giulio Magistretti en 1933.

Aquel espacio acoge desde 2010 el museo Vico Magistretti y, hasta el próximo febrero, la exposición Aproximadamente 60 sillas en 60 años.

No es casual el nombre. Ya en 1980, Magistretti organizó en Milán la exposición Veinte años, veinte sillas, que se convirtió al año siguiente, en Londres, en Veintiún años, veintiuna sillas.

La consecuencia es lógica: una homenaje en su propio estudio a sus 60 años de carrera y a su pasión por las sillas mostrando los dibujos originales, reproducciones fotográficas y algunas sillas, además de otra abundante y variada documentación, sobre las 66, para ser precisos, que creó a lo largo de su vida.

