Quintonil Diez, iniciativa creada para celebrar el décimo aniversario del restaurante Quintonil, celebró su octava edición con la presencia de Rodolfo Guzmán, el chef más imporante de Chile y uno de los más celebrados de Latinoamérica, gracias a su trabajo en la cocina de Boragó, ubicado en el puesto número 43 de The World’s 50 Best Restaurants y en el número 6 de la versión latinoamericana de la lista. Rodolfo ha sido mentor además de un impresionante número de cocineros que hoy triunfan en sus países, posicionándose como un semillero de talentos para todo el mundo. Los asistentes a la celebración tuvieron acceso a un menú exclusivo e inédito, diseñado a cuatro manos entre Guzmán y Vallejo.
El pasado sábado 13 de agosto, Alejandra Flores, Jorge Vallejo y toda la familia Quintonil fueron los anfitriones de una comimda y una cena, diseñada junto al chef Rodolfo Guzmán, en el marco de Quintonil Diez, una serie de diez experiencias para celebrar los diez años del restaurante mexicano. Guzmán viajó desde Chile para deleitar a los comensales con su magistral uso del ingrediente andino y una impresionante técnica de cocina contemporánea.
El uso de hierbas y vegetales fue muy marcado desde el comienzo, visible en platillos como el Pebre de tomate riñón y las Plantas y hierbas fuertes de verano que fungieron como segundo y tercer tiempo, respectivamente. Por su parte, Vallejo ofreció dos platos inolvidables durante el primer acto: el mamey con miel de abeja melipona y caviar y las sardinas entomatadas con vedolagas y balsámico blanco.
La presentación de los platillos deslumbró por la estética con la que Guzmán se presenta ante los comensales, quienes no dudaron en tomar fotos de cada uno de los platillos del menú. Además, Rodolfo sorprendió al utilizar cuitlacoche, uno de los elementos más mexicanos y de temporada de los que pudo echar mano, esta vez con trufa chilena y cachiyuyo. El ciervo de cola blanca, de origen yucateco, fue utilizado por ambos cocineros: Guzmán lo preparó en crudo únicamente curado en árbol de peumo, mientras que Vallejo utilizó un recado negro y crema de almendras para montarlo en un salbut, también de tradición maya. Como único postre, el chef chileno ofreció un Ice brulée mexicanizado y un sandwich helado de rosa del año armonizado con Tequila José Cuervo Reserva de la Familia Reposado.
Casa Madero, la vinícola más antigua del continente, ubicada en Parras, Coahuila, se ha sumado a Quintonil Diez con una etiqueta única diseñada en conjunto con Jorge Vallejo. Se trata de una edición limitada a 1597 botellas (en alusión al año de fundación de la vinícola) de un ensamble único de cabernet franc, malbec y petite sirah con crianza de 18 a 24 meses en barrica. Este vino sirvió para armonizar un pollo rostizado al carbón con mole de macadamia, durazno y escabeche de almejas, que ofreció Jorge Vallejo como plato fuerte. Para empezar la experiencia, los comensales compartieron un clásico como coctel de bienvenida: unas Medias de seda a base de Tequila José Cuervo Reserva de la Familia Platino, licor de granada, jugo de limón y granada fresca.
Volvo forma parte de la celebración como el vehículo oficial de Quintonil Diez, transportando al chef Guzmán y a su equipo en camionetas de lujo durante sus días en México. Por su parte, el chef Jorge Vallejo maneja una camioneta XC90 híbrida, reforzando su objetivo de consolidar la oferta de automóviles híbridos y eléctricos, en su búsqueda constante por la sustentabilidad y en congruencia de este vínculo con la gastronomía mexicana.
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quintonil.com