Cada propiedad operada y/o desarrollada por Hamak tiene una personalidad propia donde conviven la gastronomía y bienestar en espacios de alto nivel donde es cuidado hasta el último detalle. Además de Amomoxtli y Santuario, actualmente opera Capellán en Cartagena.
Actualmente tienen alrededor de 20 nuevas propiedades firmadas para abrir entre 2021 y 2023 en México, Colombia, Republica Dominicana y Panamá, la apertura más cercana es un proyecto en la Ciudad de México llamado Casa Polanco, próximo a abrirse en octubre de este año. Por lo que son una empresa mexicana en constante crecimiento aún durante los tiempos inciertos por los que todos atravesamos.

Además, todos los hoteles que toman siempre pasan por un proceso de remodelación o planeación en beneficio del hotel. Gentleman México tuvo la oportunidad de entrevistar a Alberto Ramirez, CEO de Hamak Hotels para platicar de estos procesos y cómo le dan el sello Hamak a cada una de sus propiedades, así como del crecimiento que están teniendo cada día. Pudimos hablar con Alberto sobre el proceso creativo que existe detrás de cada una de las propiedades y los proyectos que vienen en puerta de cara a este y los próximos dos años.

El sello de Hamak Hotels es dar ese toque único y mágico a cada propiedad. ¿Cuáles son los puntos más importantes a la hora de crear o aperturar un hotel?
Cada hotel tiene sus puntos mágicos e importantes, hay que descubrirlo, depende de la locación, de la cultura. Cada lugar es mágico, tiene la montaña, tiene todo este tema holístico, chamánico. Cuando empiezas a entender el lugar, el clima, la población, la gastronomía, le empiezas a dar a cada proyecto su toque mágico.

Sabemos que Hamak Hotels se enfocan en la gastronomía y bienestar, lo hemos visto en Amomoxtli y El Santuario, dos lugares increíbles en México. ¿En qué consiste el proceso creativo de estas propiedades y las que llegarán?
La gastronomía es muy importante, llegó para quedarse. Yo me acuerdo cuando era más joven que todos los restaurantes finos eran franceses, no había mexicanos. De repente, la gastronomía empieza a crecer y reexpresar, llega la comida italiana, española, china, hindú, japonesa…

Te das cuenta que la comida está la mitad de la cultura que transmitimos. En nuestras casas, a la hora de la comida suceden muchas cosas, la comida tiene una carga súper fuerte culturalmente hablando. La gastronomía está de moda y hemos entendido su valor. La comida es sentimiento, es cariño, es amor.
El tema del wellness desde que empezó la pandemia creció muchísimo. En Amomoxtli es el lugar ideal para disfrutar del wellness. Para nosotros el wellness es también un momento de silencio, descansando y disfrutando del paisaje, no necesariamente es cuidarte y el estar sano. Estar un tiempo contigo mismo o con tu pareja. Nos gusta encontrar a cada lugar qué tipo de wellness podemos ofrecer. En Valle el lago, el Tepoztlán la montaña, en Chablé la selva, playa y cenote. Estos lugares que te encuentres contigo mismo para tener una experiencia interesante.

¿Qué elementos destacaría usted en una propiedad que está fuera de México, como es Capellán en Cartagena?
Capellán es un hotel contemporáneo que lleva más o menos 4 años, lo tomamos hace relativamente poco. Ubicado en la zona Getsemaní, que es la segunda parte de la muralla. Getsemaní es un barrio bohemio de artistas callejeros, de expresiones culturales, de grafitis en las paredes, era un barrio impenetrable hace 12 años. Tiene una identidad bastante fuerte, está muy bonito, las partes de la muralla son divertidas y las calles son lindas.

La próxima apertura de Hamak Hotels en Ciudad de México será Casa Polanco, en octubre.