La firma TUDOR tiene una larga tradición en crear piezas destinadas para los buzos más exigentes. Y es que desde los años 50 fueron pioneros en poner a prueba sus relojes en manos de exploradores submarinos profesionales que dieron cuenta de su resistencia y precisión técnica. Como ejemplo podamos citar el Pelagos FXD que crearon en colaboración con la Mariana Nacional Francesa, un mecanismo para realizar la cuenta atrás durante las inmersiones y así evitar las paradas para la descompresión, sin duda una solución ingeniosa para los amantes del buceo. Hans Wilsdorf, estaría orgulloso de los logros de su marca creada en 1926.
Con este amplio conocimiento en los relojes de buceo, Tudor ha hecho crecer la colección Pelagos a la que suma su nueva creación, el Pelagos 39, que retoma muchas de los rasgos estéticos y técnicos de sus antecesores, claro con un espíritu renovado y por qué no, muy contemporáneo, ya que queda bien tanto para él como para ella. Versatilidad al servicio de la mecánica.
Hay que destacar que Tudor no escatimó en materiales para Pelagos 39 ya que su caja, claramente de 39 mm como su nombre lo indica, se ha construido en titanio de grado 2, que también se ha extendido hasta el uso del brazalete que en la tradición de Tudor, es de tipo “T-fit”, es decir de ajuste rápido y con extensión para el buceador. Pero como lo mencionábamos, esta versátil pieza se entrega con una correa complementaria de caucho negra, también con cierre de hebilla de titanio 2.
Pelagos 39 se suma a los modelos Pelagos, Pelagos LHD y Pelagos FXD que se distinguían por poseer funciones profesionales para el buceo, mientras que el nuevo integrante llega para satisfacer la necesidad de poseer un reloj con una riqueza técnica, pero también con un amplio estilo urbano, perfecto para lucirse después de una gran inmersión y poder contar la hazaña durante la cena. El bisel es giratorio unidireccional con disco de cerámica con acabado satinado de tipo “rayo de sol”, con revestimiento luminiscente de grado X1 Swiss Super-Luminova, mientras que la carátula es negra y para mantener la tradición Pelagos, sus manecillas son de tipo “Snowflake”, una característica que nació en 1969.
El calibre, por su parte, es de Manufactura Tudor MT5400 con certificación COSC con espiral de silicio que le permite al guardatiempos ofrecer una confiable reserva de marcha de 70 horas. Además vale la pena mencionar que esta pieza ofrece una variación por encima del estándar de los relojes tradicionales, ya que alcanza -2 +4 segundos. Finalmente, mencionar que Pelagos 39 ofrece una resistencia al agua de hasta 20 atmósferas, es decir 200 metros. Sólo para valientes.
