El restaurante Ryoshi es la gran sensación de Polanco. Desde que llegó a la Avenida Masaryk, ya se ha convertido en uno de los lugares más icónicos y se encuentra de forma asidua en los rankings de los mejores de la Ciudad de México.
“Ryoshi significa pescador. Nos consideramos pescadores de experiencias y nuestra intención es envolver al cliente con esta atmósfera exclusiva y única del lugar”, nos confiesa Jacob Espinoza, capitán de meseros de Ryoshi.
Ryoshi es un restaurante cuyo concepto es el ‘hangout fine dining o kaiseki, es decir, porciones al centro para compartir. Los platos son pequeños pero con mucho sabor y hay gran variedad para todo tipo de comensales.
Hay 3 tipos de cocina dentro del restaurante: Una es robatayaki, que es una cocina tradicional japonesa. Yaki significa asado y robata, al carbón o de las brasas. Esta cocina surge en los tiempos ancestrales cuando los samuráis llegaba y tenían que cocinar en los cascos. Cocinaban en carbones, a la brasas, para así subsistir en sus largos viajes.
La otra cocina es el Sushi bar. Tienen un Sushi chef que personaliza el servicio y te recomienda los mejores platillos mientras te cuenta una breve historia de cada plato. Por último, en la cocina caliente, están la mayor parte de las entradas y los postres.
Podemos recomendar los siguientes platillos. De entradas, para abrir el apetito, te sugerimos ordenar los rollitos de Wagyu y el truffle sashimi, que contiene atún, salmón, kampachi, trufa negra, caviar, cebollín y soya con aceite de truf. Un auténtico manjar. Seguimos con más entradas, en este caso calientes, para compartir y nos llega unas crispy brussels con piñón dulce. ¡Espectaculares! Sin duda, sorprenden cuando las pruebas… y se superan con los bonzais de brócolis. ¡Una auténtica experiencia sensorial!
Siguen y siguen llegando platillos, a cada cuál más delicioso. En esta ocasión probamos las brochetas de pork belly y 4 niguiris, tuna play, las 4 partes de la aleta azul. Y finalizamos degustando el platillo insignia del restaurante, el famoso Rysohi Roll que lleva king crab, spicy, tobiko, burbujas tempura y atún.
Para cerrar con broche de oro, el postre, o mejor dicho, los postres, donde tenemos oportunidad de disfrutar con un exquisito pay de plátano y otro de elote, sencillamente, espectaculares, y saben aún mejor acompañados del Carajillo de la casa. Sin duda, Rysohi lleva a otro nivel la cocina japonesa con su propuesta de Izakaya. Se lo recomendamos ampliamente y agradecemos al lugar y todo el equipo, por sus amables atenciones. Sin duda, regresaremos.