El pasado octubre de 2025, durante el Gran Premio de Fórmula 1® de la Ciudad de México, una experiencia inmersiva se robó el protagonismo del rugido de los motores de los monoplazas. Volcán de mi Tierra, el tequila artesanal que venía de conquistar Doble Oro en San Francisco y en los Premios Agavos, regresó como Tequila Oficial de la F1® para presentar TLETL, una experiencia sensorial creada en alianza con Handshake Bar, el speakeasy mexicano reconocido como el número 1 del mundo en 2024 y número 2 en 2025. Juntos, marcaron un antes y un después en la hospitalidad del Paddock Club.
TLETL (del náhuatl, “fuego”), surgió como un concepto que fusionó tres universos: la artesanía de Volcán, la creatividad de Handshake Bar y la energía y sobre todo la emoción de la adrenalina del automovilismo. Concebido como un refugio oculto y secreto dentro del Paddock, el espacio rindió homenaje al origen volcánico del agave y a la iconografía mexica que ha moldeado por siglos la identidad del país. Se trata de un fuego antiguo, silencioso y exquisitamente contenido. Se trataba de un bar clandestino para quienes buscan intensidad sin los focos, un escenario donde cada cóctel era una chispa y cada detalle, una ceremonia. Viajas a otro mundo donde el fuego y el tequila, es el protagonista.
Elegante, subterráneo y vestido con acentos inspirados en el Día de Muertos, TLETL se convirtió en un portal hacia un México poco visto y profundamente sofisticado. Desde su entrada tipo túnel iluminada con los nombres de los socios, hasta un bar digno del universo de James Bond y un altar de colección decorado con piezas únicas, el espacio celebró la unión entre tradición y lujo contemporáneo. Una tapa dorada y el emblema de la familia Gallardo remataron una estética impecable que transportó a los invitados a un mundo donde el tiempo parecía detenerse.
La experiencia elevó los ya prestigiosos tequilas Volcán X.A. y Blanco Tahona, que fueron reinterpretados por los galardonados bármanes de Handshake Bar a través de tres cócteles exclusivos: un blend con aceite de oliva, manzana verde y romero; una versión delicada con sake de lichi, lima y té de jazmín; y una creación intensa con mezcal, maracuyá, vino de naranja y haba tonka. Cada trago fue un tributo al latido de México, un puente entre ritual y modernidad. ¡Sin duda, una experiencia única y muy exclusiva en el GP de México!
Para Volcán de mi Tierra, esta colaboración representó un paso natural en su presencia dentro de la F1®. “Buscábamos promover el lado desconocido de México: autenticidad, creatividad y una dedicación absoluta a la artesanía”, compartió Carlos Pechieu, Director Comercial de la marca, destacando que no existía aliado más perfecto que Handshake Bar para llevar esta visión al escenario mundial. Desde la perspectiva del bar, la alianza fue igualmente orgánica; como señaló su cofundador Marcos Di Battista, ambos comparten la misión de elevar el nombre de México a través de la excelencia.
Así, entre motores que rugían afuera y el brillo tenue del fuego simbólico adentro, TLETL se consolidó como el destino más codiciado del día de la carrera. Una experiencia que no solo celebró la grandeza del automovilismo, sino que también honró el espíritu volcánico, ritual y profundamente elegante que define a México. En el corazón del Paddock, ardió un fuego que solo unos pocos tuvieron el privilegio de descubrir.
