Ya era hora de reflexionar sobre el tiempo, sobre cómo modifica significados y significantes, objetos y sujetos, formas y modas. Sobre cómo marca los segundos y las horas, los días y las noches, las estaciones y los años. Ya era hora de volver a escuchar el latido del tiempo en la herencia relojera de los grandes maestros en sus creaciones y en sus evoluciones.
Como los de Vacheron Constantin, firma suizo fundada en 1755. Un universo que, desde principios del siglo XVIII, siempre ha reservado un lugar especial para el tiempo en su vertiente femenina. Esto lo demuestran algunas de las piezas de archivo más interesantes de la Vacheron Constantin Heritage Collection, la colección privada que la maison ha decidido llevar a boutiques de todo el mundo con exposiciones temáticas para unos pocos afortunados. Relojes de bolsillo, ceremoniales, deportivos, ocultos en joyas preciosas, con la primera referencia histórica que data de 1815.
Guardatiempos femeninos únicos que han atravesado corrientes artísticas, tendencias de la moda, cambios de estatus social, revoluciones, evoluciones e involuciones y que narran, en definitiva, dos siglos de la historia de las mujeres que los han llevado. Y que nunca dejan de ser fuente de inspiración y asombro para los nuevos modelos de la maison como los que se pudieron ver durante la reciente edición de Watches & Wonders 2024 con piezas de la colección Overseas o Patrimony.
Son un reflejo de su amplia experiencia técnica misma a la que año con año vinculan con personalidades que retratan los retos y logros de nuestro tiempo, como lo es la activista, exploradora y artista estadounidense Zaria Forman, famosa por sus majestuosas obras en pastel inspiradas en lugares remotos afectados por el cambio climático. Un ejemplo perfecto de cómo el tiempo, en las manos adecuadas, puede cambiar significados, significantes y mejorar objetos y sujetos.
