De la mano del chef Israel Aretxiga, reconocido por Gentleman como el mejor chef de México, y con un equipo excepcional en cocina y sala, Zeru se ha convertido en una referencia de la alta gastronomía de nuestro país. Su constante inquietud por superarse lo lleva a alcanzar cada vez notas más altas. La incorporación de Arisbeth Araujo, nombrada Sommelier del Año por la Guía de Culinaria Mexicana, es una clara muestra de su compromiso con la calidad.
El éxito de su cocina radica en la fusión de innovación y calidad, donde une la creatividad con el recetario mexicano y el acento vasco en unos hornos cuyo fuego domina a la perfección ya sea en carne o en pescado. Cuenta con un nuevo salón y una pastelería dedicada a la elaboración de postres de alta gama, como Cielo, junto a un menú dinámico y sorprendente que deleita a los comensales.
El éxito les ha llevado también a triunfar en Miami, donde Zeru mantiene su identidad con una cuidada selección de vinos y una carta que asombra en Florida por su fusión de acentos vasco y mexicano. Ahora, el restaurante va más allá y nos ofrece un pop up con Shua Ibáñez, sommelier del restaurante de tres estrellas Michelin, Arzak, de San sebastián, considerado el mejor de España durante décadas.
En esta primera entrega del Pop Up TERRA, que se llevará a cabo los días 25, 26 y 27 de noviembre, nos invita a vivir una experiencia donde la armonización en todos los sentidos no solo es el hilo conductor, sino que se presenta de manera absoluta y completa. TERRA es un proyecto curado y concebido por la mente inquieta y la pasión por el vino de Israel Aretxiga, quien, junto a las sommeliers Sophie Avernin y Arisbeth Araujo, nos transporta en un viaje alrededor de nuestra TERRA. En este recorrido, las paradas obligadas no son ciudades ni países, sino regiones vitivinícolas y zonas productoras de los mejores ingredientes que ofrece nuestro planeta.
A través de 14 propuestas diferentes, la mayoría a cargo y guiadas por la sommelier Shua Ibáñez, descubrimos 14 platos nuevos que complementan a la perfección los vinos, destilados o tés propuestos. Este enfoque busca desmitificar la idea de que los menús gastronómicos deben ser largos, tediosos o necesariamente secuenciales, dejando abierta la oportunidad para que el comensal decida cuáles de todas las propuestas elegir o repetir, pero sobre todo experimentar en un ejercicio de total armonía y libertad. Este nuevo camino nos lleva a nuestras raíces y nuestra tierra, al tiempo que rompe las fronteras del sabor y los aromas. Zeru nos invita a ir más allá. Y el viaje continúa.