Durante tres décadas, este whiskey ha sido cuidadosamente madurado en barricas de bourbon y oloroso sherry durante 14 años, antes de finalizar su añejamiento durante 16 años adicionales en barricas de primer llenado de Pedro Ximénez (variedad de uva blanca que crece en varias regiones vitivinícolas españolas). El resultado es un equilibrio perfecto entre la elegancia, la dulzura y la complejidad aromática que distingue a los grandes single malts del mundo.
“El roble da sabor y color a nuestro single malt. Las barricas de PX añaden una tonalidad dorada más intensa y una profundidad inigualable”, explica Alex Thomas, Master Blender de Bushmills.
Solo 1.500 botellas han sido creadas, convirtiendo a Bushmills 30 Year Old en un tesoro de colección que refleja el legado de más de 400 años de tradición irlandesa.
Notas de cata
- Color: Dorado oscuro y profundo.
- Nariz: Aromas dulces e intensos de pasas, higos, dátiles y toffee, con sutiles notas de clavo y especias dulces.
- Sabor: Textura aterciopelada con matices de frutas secas, praliné y cáscara de naranja, que evolucionan hacia suaves notas de vainilla y masa horneada.’
- Final: Largo, complejo y persistente, con ecos de frutas secas y caramelo que invitan a un segundo sorbo.
Bushmills 30 años se disfruta mejor solo, lentamente, y con respeto por el tiempo que le ha dado forma. Una expresión excepcional que honra la herencia de Bushmills, donde el arte, la paciencia y la pasión se convierten en un elixir único.
